El origen y problema de este historia viene de muy lejos, verano de 2010 para ser más concretos: el holdout de Revis en busca de un contrato de larga duración. Las disputas entre Mike Tannenbaum y Woody Johnson con los agentes del jugador se resolvieron de la peor manera posible; sin alcanzar un acuerdo definitivo, simplemente aplazando el problema con un contrato "parche" como ellos mismos lo denominaron. Entonces quedó claro que ambas partes deberían volver a sentarse para negociar un contrato a largo plazo de verdad que hiciera de Revis uno de los defensas mejor pagados de la historia. ¿Qué pasó con eso? Que Woody Johnson se cansó de las negociaciones con los agentes, Tannenbaum tampoco podía manejar la situación y ese nuevo encuentro jamás se produjo.
Con este panorama llegamos a 2012, con toda la actividad aplazada teóricamente para el final de temporada de forma que los Jets renovarían al jugador antes de jugar en año de contrato en 2013; arriesgándose a perderlo en la siguiente pretemporada sin ninguna compensación. Pero en la semana 3, en Miami, Revis se rompe el ligamento cruzado de su rodilla izquierda y la historia tomaba un giro inesperado. La incertidumbre del estado en el que regresaría al campo tras una lesión como esa no ayudaría a que el front office de los Jets diera el paso adelante y ofreciera el contrato que el jugador pedía. Y al final de 2012 se producía otro cambio, en este caso en la dirección del equipo, con el fichaje de John Idzik como nuevo general manager.
Todos estos acontecimientos nos llevan a las primeras conversaciones entre Idzik y Woody, Idzik y el entorno del jugador e Idzik y Mark Dominik, GM de los Bucs. La negativa rotunda de Woody a pagar 15-16 millones al año a Revis desencadenaron el resto de negociaciones. Idzik no podía ofrecerle lo que querían a los agentes de Revis y la única salida era enviar al jugador al único equipo que había ofrecido un interés real.
Es cierto que la compensación (1ª y 3ª) parece escasa para un jugador de la talla del #24 pero los Jets tampoco tenían muchas más opciones. Una vez se retiró la renovación de la mesa de negociaciones el objetivo era sacar el mayor beneficio posible y las opciones eran lo que ofrecía Tampa o un pick compensatorio en 2015 si Revis se iba como agente libre la próxima temporada. La opción correcta era obvia y hay que reconocer el trabajo de Idzik ya que las primeras ofertas de los Buccaneers no incluían su pick de primera ronda de este año.
¿Qué significa todo esto para los Jets? Que comienza la reconstrucción acelerada. Acelerada no porque haya prisas sino porque hay más herramientas de lo habitual para llevarlo a cabo. Los Jets tendrán entre 5 y 6 picks extra en los próximos dos drafts: los 2 del trade de Revis y el resto picks compensatorios por los agentes libres que han dejado el equipo (LaRon Landry, Mike deVito, Dustin Keller, Shonn Greene, etc.). En total, serán casi 20 picks disponibles entre 2013 y 2014 y cerca de la mitad (8) serán en las 3 primeras rondas; material más que suficiente para formar una base sólida a largo plazo.
Las inmensas posibilidades que ofrece el futuro, un proceso de reconstrucción es muy interesante, no pueden borrar que con este último movimiento los Jets han dejado escapar no sólo un magnífico jugador sino la imagen de la franquicia del último lustro. Darrelle Revis hubiera alcanzado el nivel de mitos como Curtis Martin, Joe Klecko o incluso Joe Namath al final de su carrera de haber seguido en los Jets. Para el aficionado, yo soy uno más, es muy difícil decir adiós a uno de los mejores jugadores que se ha visto en Meadowlands, uno de los pocos motivos por los que ver a este equipo domingo tras domingo fuera cual fuera la situación del equipo.
Toca despedirse de Revis. Ojalá vuelva a ser el mejor cornerback de la liga (bueno, el segundo mejor tras Cromartie u otro jugador de los Jets) y podamos disfrutar de su juego al máximo nivel aunque nunca será lo mismo con la camiseta de los Bucs. Hasta siempre, Darrelle!!
espero que tomemos a eddie lacy o justin hunter con la proxima seleccion
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